LA GUARDIA CIVIL RECOGE EN UN TERRENO RURAL DE HELLÍN UN FRAGMENTO AEROESPACIAL DE TITANIO.

Efectivos del Grupo de Desactivación de Explosivos (GEDEX) de la Guardia Civil de Murcia se hicieron cargo del residuo.



Componentes del Grupo de Desactivación de Artefactos Explosivos y de naturaleza Nuclear, Radiológica, Biológica y Química (GEDEX) de la Guardia Civil de Murcia, procedieron a la recogida de un fragmento aeroespacial, de forma ovalada, localizado por un particular en un terreno rural del término municipal de Hellín.

Hallazgo en un terreno rural

Un particular, que practicaba senderismo por un camino del paraje “El Pocico” del término municipal de Hellín, fue quien localizó el residuo y sin manipularlo se trasladó hasta el cuartel de la Guardia Civil de Hellín para comunicar el hallazgo. Una patrulla de esta unidad se trasladó de inmediato al lugar donde había aparecido el posible fragmento aeroespacial, comunicando la incidencia al Centro Operativo de Servicios (COS) de la Guardia Civil de Albacete, quien activó al GEDEX de la Guardia Civil de Murcia.

Fragmento de 10 kilos de peso

Una vez en el lugar del hallazgo, los dos Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX) de la Guardia Civil de Murcia desplazados, tras examinar el material verificaron que se trataba de un depósito auxiliar de combustible aeroespacial. Este depósito, fabricado en titanio, de 80 cms de diámetro y 10 kilos de peso se encontraba recubierto de un material aislante.

El fragmento, una vez retirado por los TEDAX de la Guardia Civil será entregado en el Servicio de Empleo y Formación (SEF) de Cartagena, para su estudio e investigación.

Material inerte y sin riesgo radiactivo

El material recogido por la Benemérita, considerado  basura aeroespacial, no tiene ningún riesgo o peligro para las personas o el medio ambiente al carecer de cualquier componente radiactivo.

Otros hallazgos similares

El fragmento hallado es de similares características a otros tres localizados y recogidos por los TEDAX en el mes de noviembre de 2015 en las localidades murcianas de Mula y Calasparra.