Desde hace un tiempo se viene produciendo un proceso de apertura de las estructuras orgánicas de IU a la idea de la convergencia con todo movimiento cívico, ecologista y plataformas ciudadanas, etc., que aspiren a alcanzar mayores cotas de dignidad, de equidad y de justicia social, económica, política y legal. Los procesos desarrollados dentro de IU en Madrid, tanto a nivel Federal como a nivel de la Comunidad Autónoma, como en muchos otros lugares del territorio nacional, incluyendo Albacete capital, y cuya cabeza más visible en la actualidad es Alberto Garzón e históricamente es Julio Anguita, son una clara muestra de ello.

Pero no en todos los lugares es posible un proceso de apertura de las estructuras, ni de la renovación de las personas. Después de largos y denodados intentos porque esa apertura y renovación se produjese en la Asamblea Local de Izquierda Unida de Hellín; después del incumplimiento de algunos acuerdos adoptados por la Asamblea Local; después de negativas sistemáticas a iniciar procesos de conversaciones con otras fuerzas y plataformas que tuviesen como objetivo la creación de un movimiento cívico, en condiciones de igualdad, para generar las condiciones necesarias para alcanzar la mayoría social y política necesaria para cambiar la situación del Ayuntamiento de Hellín y superar el bipartidismo; después de continuados esfuerzos de intentar hacer efectivo la incorporación en igualdad de condiciones de los simpatizantes e independientes al trabajo de la asamblea; tras la obstinación en no proceder a la renovación de aquellas personas que incumpliendo los principios que inspiran toda la filosofía y actuación de IU se aferran a sus cargos públicos, aún incumpliendo acuerdos tomados por la Asamblea Local al respecto; después de comprobar que lo que aparentaba ser una renovación de personas era más una ficción que una realidad, pues las consignas que sirven para orientar la toma de decisiones siguen emanando de las mismas personas aunque figuren otras, etc.

Después de todo ello, tras la Asamblea celebrada el pasado 15 de diciembre de 2104, un grupo de afiliados entiende que sus continuados esfuerzos y su trabajo para la transformación, tanto de Izquierda Unida de Hellín, como la participación de de IU de Hellín en creación de una mayoría social, en igualdad de condiciones, que pueda acabar con la alternancia bipartidista que nos ha llevado a la situación crítica municipal, no está obteniendo ni el respaldo ni los resultados adecuados, hemos decidido abandonar la afiliación en IU al considerar prácticamente imposible el avance de las ideas que proponemos y que se están abriendo paso en otras Asambleas de IU. Entendemos que sin apertura a formas de organización y a la toma de decisiones horizontales, la constitución de procesos abiertos y no dirigidos desde arriba, la renovación de personas que se han anclado en sus cargos y sillones, haciendo de la política una profesión en vez de un servicio público, no es posible seguir aportando nuestro trabajo, quedando desde éste momento dividida y rota la Asamblea local de IU de Hellín.

Lo que comunicamos a la ciudadanía de Hellín para su información.