La Diputación Provincial de Albacete impulsó en el año 2021 las Ayudas provinciales a la Investigación Científica, Juan Carlos Izpisúa Belmonte, propuesta creada por el ejecutivo presidido por Santi Cabañero con el objetivo de dirigir recursos a este área apostando asimismo por los y las profesionales que trabajan en grupos anclados a esta provincia.
En la primera de las convocatorias de esta línea de subvenciones, el doctor Luis A. Martínez y la doctoranda Cristina García, farmacéuticos comunitarios de Tiriez, resultaron beneficiarios de una de las becas gracias a una propuesta centrada en la detección precoz del deterioro cognitivo. Iniciativa que implicaba un contacto estrecho con la población estudiada, y que ha sido canalizada a través de la farmacia comunitaria del municipio, permitiendo los resultados obtenidos conocer las características diferenciales de un paciente que envejece de forma saludable frente a otro que no lo hace, y diseñar intervenciones (grupales o individualizadas) para prevenir el deterioro cognitivo.
Para su desarrollo, los autores (apoyados por la experiencia del grupo investigador en el que se integran), diseñaron una metodología que permite valorar factores relacionados con la medicación, problemas de salud, nutrición, actividad física, sueño, y estrés, entre otros. Todo ello, a través de una entrevista presencial estructurada en seis bloques. En concreto, para cribar el deterioro cognitivo se utilizan tres pruebas neuropsicológicas rápidas consensuadas previamente con neurólogos (Memory Impairment Screen; Test de Pfeiffer y Test de Fluencia Verbal), controles que se complementan con un análisis de marcadores genéticos en saliva.
Además, como novedad, la metodología incluye la valoración de aspectos relacionados con la soledad, el aislamiento social, la resiliencia y el propósito en la vida, y ha quedado demostrado que el análisis global de los mismos es relevante en entornos rurales en riesgo de despoblación donde se ubican muchos de los municipios de la provincia de Albacete.
El estudio se ha pilotado en más de 200 pacientes mayores de 50 años (de los cuales, cerca del 30% pertenece al municipio de Tiriez) y los resultados muestran que aquellas personas con mayor capacidad de afrontar situaciones difíciles (resiliencia), con relaciones sociales satisfactorias, con propósitos en la vida y sin diagnóstico de hipercolesterolemia, diabetes o hipertensión, tienen menor riesgo de desarrollar deterioro cognitivo y, por consiguiente, derivar en una demencia.
El proyecto de investigación, que lleva por título ‘Estudio de los factores que influyen en el envejecimiento saludable y su relación con el deterioro cognitivo en población rural’, ya ha dado sus frutos en el primer año de su desarrollo, permitiendo la divulgación de los resultados en diferentes congresos nacionales y la publicación del grueso de los mismos en la revista ‘International Journal of Environmental Research and Public Health’, en un artículo titulado ‘Abordaje de los factores psicosociales en el desarrollo de deterioro cognitivo desde una perspectiva holística: diseño de la metodología y estudio piloto’.