En un lunes deportivamente muy significativo para la provincia de Albacete por diversas citas (como la Gala Nacional del Deporte que acoge esta misma tarde-noche el Teatro Circo) se ha inaugurado, en los aledaños del estadio Carlos Belmonte, una escultura homenaje al célebre futbolista de Fuentealbilla, Andrés Iniesta.
Un acto conducido por el periodista Sergio Sánchez que ha despertado el interés de un público, volcado en hacerle llegar a su ‘paisano’ su cariño y que ha reunido a múltiples personalidades del ámbito institucional, deportivo y social, entre quienes se encontraban, el secretario de Estado de Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes; el presidente de la Diputación de Albacete, Santi Cabañero (acompañado del diputado de Deportes, Dani Sancha); la directora de la entidad impulsora de la escultura, la Fundación Soliss, Mª Luisa González Bueno; a través de videoconferencia desde Emiratos Árabes Unidos (donde milita en el Emirates Club), el propio jugador; el entonces seleccionador de la ‘La Roja’ Campeona del Mundo, Vicente del Bosque; el vicepresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro; el alcalde de Albacete, Manuel Serrano y distintos representantes del Albacete Balompié,
Tras sendos vídeos (sobre el proceso de elaboración de la escultura y sobre la historia del propio futbolista) que han servido para crear ambiente y, sobre todo, para ir llenando el momento de una emoción que ha quedado más que demostrada en las palabras inmediatamente posteriores del protagonista de la cita ‘a distancia’, así como del padre del jugador, José Antonio Iniesta, el presidente provincial, Santi Cabañero, tomaba la palabra destacando la importancia de Iniesta para la provincia y para España.
Cabañero ha comenzado reconociendo la grandeza y, al mismo tiempo, la enorme humildad que siempre han acompañado al mítico jugador que, como reza el título de su escultura, es ‘eterno’.
Escultura de un instante inolvidable y un ‘Iniesta eterno’
La obra, realizada por el escultor Javier Molina, está diseñada en bronce a tamaño real y representa el instante exacto en el que Iniesta impactó el balón del gol que dio a España su primer Mundial de Fútbol en 2010.
Como ha recordado Cabañero, desde aquel 11 de julio de 2010, casi sin darnos cuenta, ‘116’ ya no es para prácticamente nadie un mero número: Es ‘el minuto’ en el que Andrés Iniesta firmaba, en ese impresionante Soccer City de Johannesburgo, Sudáfrica, el ‘hito’ que vino a ser ‘el primer día del resto de nuestra vida futbolística’ de España, subrayando la trascendencia del momento y su impacto en la historia deportiva del país, doblemente significativa para quienes son o tienen algún vínculo directo con la provincia de Albacete y ese día no sólo veían cómo el país ganaba el primer Mundial, sino que se hacía justicia.
“A nadie se nos va a olvidar aquel 11 de julio del 2010, minuto 116, en el que se para el mundo para hacer justicia con el fútbol español, para hacer justicia con una generación (España siempre ha tenido magníficos futbolistas), ‘de lujo’, bien comandada por Vicente del Bosque, otro de los ‘grandes’ que representa valores, tanto dentro como fuera del campo, tal y como le pasa a nuestro Andrés…; y ese gol histórico, ese momento histórico, es un chico de Fuentealbilla, un albaceteño, el que lo hizo realidad: eso… nos hace sentir mucho orgullo”, ha señalado.
Se cerraba un ‘círculo perfecto’ en torno a Iniesta, un hombre cuyo talento y humildad merecían ese momento más que nadie, como ha reflexionado el presidente de la Diputación señalando que, aunque cualquier jugador de esa gran Selección habría merecido haber anotado aquel gol crucial, era Andrés, con su claridad de visión (tanto en el juego como en la vida), su sencillez y elegancia, siempre ajeno a las estridencias… quien verdaderamente más lo mereció, resaltando su capacidad para mantener al fútbol anclado en su esencia más ‘romántica’ y, sobre todo, “su generosidad para hacer mejores a quienes lo rodeaban”.
En una sociedad (y en un ámbito como el del fútbol) donde a menudo se premia lo llamativo y lo efímero, Iniesta ha sido ‘el contrapeso’, destacando por cualidades que hacen de los deportistas, mitos.
“Andrés es un chico normal capaz de hacer cosas extraordinarias; y eso siempre lo ha hecho diferente, un hombre que en un momento de ‘éxtasis deportivo’, el chico que cuela el gol que nos ha dado el Mundial se acuerda de su amigo, Dani Jarque… Esos valores no se pueden simular, esos valores, o lo llevas dentro, o no los llevas; y por eso en Albacete estamos muy muy muy orgullosos de la figura de Andrés Iniesta, por lo que supone dentro de un terreno de juego, pero también por los valores que supone fuera”, ha resaltado Santi Cabañero.
Admiración de ‘manchuelo’
Compartiendo con Andrés Iniesta su condición de ‘futboleros’ y, sobre todo, de ‘manchuelos’ (el presidente de la Diputación es de Cenizate, donde vive, localidad ‘vecina’ a la Fuentealbilla natal del jugador), Cabañero ha compartido con el público distintos momentos personales que ha tenido la suerte de vivir, siendo testigo directo (en las muchas tardes vividas en el mítico Bar Luján del abuelo del jugador) de cómo esa figura en torno a Iniesta poco a poco iba transformando la forma y el fondo de su pueblo; de la comarca; de la provincia; de la región; del país… y del mundo.
Como ha concluido el presidente, la historia deportiva hacía justicia a Andrés ese 11 de julio; y, de alguna forma, con esta escultura en un lugar tan especial junto al Belmonte, “también la provincia de Albacete lo sigue haciendo», siendo no sólo un homenaje a la carrera deportiva de Iniesta, sino un símbolo también eterno del orgullo y los valores que representa para Albacete y para España. Concluyendo con un sincero “visca Iniesta, visca Albacete y visca Fuentealbilla”.
El coste de esta escultura ha sido financiado por la Fundación Soliss mediante el Premio Internacional de Escultura ‘Julio Pascual’ que convoca con carácter bianual para homenajear a personas destacadas de la región.