Está claro que el futuro de ADB Helín/Riegos de Levante en las últimas temporadas es el sufrimiento. Y no parece que esta campaña, cuya segunda vuelta comenzó el pasado fin de semana, vaya a ser una excepción, ya que aunque los hellineros se juramentaron en la víspera e hicieron una piña para intentar enderezar el rumbo, al final cosecharon una nueva derrota que les deja en una situación muy delicada, con muchos partidos para el final.
Al conjunto de Daniel Fernández tan sólo le salva-y nunca mejor dicho haciendo un juego de palabras con el gran objetivo que persigue-que sólo un equipo pierde la categoría y, en este sentido, Criptana tiene muchas papeletas para regresar a la categoría de la que procede. Pero por si acaso bien harían los hellineros en sumar un buen puñado más de victorias si no quiere verse agobiado, aún más si cabe, en la recta final de la liga.
El 2014 terminó de maner muy aciaga, no sólo en lo deportivo, con una racha de resultados negativos muy preocupantes tras un comienzo de liga que había sido más o menos esperanzador, con dos victorias casi a las primeras de cambio que no hacían presagiar, ni para el más de los pesimistas, este escenario.
Pasó la Navidad y en puertas de este desplazamiento a Cuenca hubo una especie de gabinete de crisis entre los jugadores, el técnico y la junta directiva, quien si bien reconoció el esfuerzo de la plantilla en una categoría en la que casi nadie cobra, se pidió un poco más de implicación, en la medida de lo posible, tanto en los entenos, como en los desplazamientos. Hasta el punto que a Cuenca viajaron los que estaban dudosos, como Lauri, Nacho y Félix, y el único que se quedó en casa fue Juan Pedro Gil.
Con casi todo el equipo de gala el único consuelo que le queda a ADB Hellín tras la derrota es que se demostró que contando con casi todos los efectivos en los partidos que restan y, sobre todo en casa, a buen seguro que las victorias van a llegar. Pero es necesario, sin duda, el compromiso y la presencia de todos los jugadores posibles para nadar y llegar, cuanto antes, a una zona mucho más tranquila.
Los hellineros, al igual que ocurrió en la primera vuelta del año pasado, merecieron algo más, ya que estuvieron dentro del partido, y quizás echaron de menos la aportación de Andrés Sánchez, con gripe y, por tanto, mermado de facultades físicas, y que sólo anotó tres puntos. Aunque además del omnipresente Dani, que se fue hasta los 28, y la aportación de Alejandro de Andrés, en ataque y en los rebotes, Edu Andújar y Lauri González firmaron buenos números en un choque marcado por la igualdad.
El partido comenzó con alternativas en el marcador, y con Dani y De Andrés muy entonados sobre el aro contrario, ante un Ortega que se comportaba como el mejor de un equipo local que comenzó la temporada entre alfileres, y ya suma siete victorias que le mantienen en una cómoda posición en la tabla, por lo que al final del primer acto se llegó con tablas en el luminoso.
Pero si ADB se colocó 19 – 21 apenas comenzó el segundo cuarto, de nuevo aparecieron los viejos fantasmas del pasado y las lagunas ofensivas que se tradujo en un parcial de 13 – 0 para Cuenca que le daba una diferencia de más once en el marcador. Aunque en el partido de los tirones Hellín se acercó a triple limpio con cuatro lanzamientos casi consecutivos de Nacho, Lauri y, en dos ocasiones, de Dani, que dejaron el encuentro en 38 – 33.
A la vuelta del vestuario Ortega y Ruipérez estiraron un poco más la diferencia para Cuenca ante un ADB que volvió a reaccionar, con la posibilidad de rotar en el banquillo, de la mano de Lauri, con un triple, junto al que anotó Andrés Sánchez, que volvieron a situarle, 45 – 41. Sin embargo una serie de jugadas algo discutidas por los hellienros, en cuanto a las decisiones arbitrales se refieren, permitieron a los de la Ciudad Encantada marcharse, 55 – 43, al final del tercer cuarto.
De cara al momento de la verdad y sin nada que perder, ADB lució su mejor versión guiado por Lauri, Dani y Edu Andújar, hasta acortar distancias en el marcador, 59 – 56, a falta de cuatro minutos. Pero un triple in extremis de Caster provocó el 62 – 56.
A partir de ese momento una serie de decisiones de los colegiados impidieron de alguna manera la reacción de un ADB que, sin embargo, se recompuso, hasta el 66 – 64, con los tiros libres de Lauri y Dani.
En el momento de la verdad Hellín no encontró ni la claridad ni el acierto necesario para darle la vuelta al marcador, por lo que se vio obligado a una presión a toda cancha que aprovechó Cuenca para ir a la línea de tiros libres, desde donde se mostró acertado para sumar la victoria y, al contrario, ADB se quedó por enésima vez esta temporada con la miel en los labios de conquistar el primer triunfo de la temporada lejos de casa. El próximo sábado recibirá en casa al Talavera.
Anotadores:
Cuenca: Ortega (16); Mora (7); Aguilar (9); Collado (8); Mondéjar (3); Castar (13); Ruipérez (11); Jiménez (6); Gutiérrez, y Bralero.
ADB Hellín: Alejandro de Andrés (14); Daniel Fernández (28); Andrés Sánchez (3); Edu Andújar (8); Lauri González (12); Nacho Vidal (3); Rafa Marín (1); Raúl Avia, y Félix Martínez.
Parciales: 19 – 19 / 19 – 14 / 17 – 10 / 18 – 26.
Arbitros: Olivas y Guijarro.