Santi Cabañero ha reiterado el total respaldo de la institución provincial a los alcaldes y las alcaldesas que vienen expresando su preocupación ante el cierre (o al anuncio de cierre) de oficinas de una entidad financiera en sus localidades.
“Como presidente de la Diputación tengo que ser muy respetuoso con cualquier entidad financiera o con cualquier empresa o persona (física o jurídica) que opere en la provincia, pero nada nos impide mostrar nuestra disconformidad y hablar claramente” ha señalado, tras ser preguntado del asunto por los y las periodistas.
El máximo dirigente provincial ha recordado que, junto al vicepresidente económico de la Diputación, ha tenido ocasión de abordar este tema en varias reuniones tanto con representantes tanto de la entidad financiera que acometería estos cierres como de otras. “La explicación que te dan es que se deben a sus cuentas de resultados y a sus accionistas y que están en su derecho, como empresa, de cerrar las oficinas que no les son rentables” ha explicado Cabañero, que ha sido claro al posicionarse en favor de las localidades del medio rural.
“Sí, están en su derecho de cerrar, pero quizá entonces habría que recordar que, cuando hubo que poner muchísimo dinero público para rescatar a las entidades financieras (dinero público que, probablemente, no se va a devolver), la ‘excusa’ que ponían era que lo importante eran los clientes, no tanto los accionistas; por tanto, no puedo entender ese ‘liberalismo salvaje’ cuando interesa y ese ‘intervencionismo’ cuando interesa (pero cuando interesa siempre a los mismos…)”, ha afirmado.
Para el presidente provincial, se trata de “una muy mala noticia” y, si bien ha señalado que la Diputación, por desgracia, tiene pocas herramientas para actuar en este sentido, ha pedido que nadie dude de que, aquéllas que tenga, las va a intensificar: “Por ejemplo, si la Ley de Contratos nos permite, cuando operamos con entidades financieras, primar a las que tienen más presencia en el territorio, lo vamos a hacer; creo que estamos en nuestro derecho de querer más a aquéllos que más nos quieran y de querer menos a aquéllos que nos quieran menos…”.
Cabañero: “Si al final lo que estamos asumiendo es que las administraciones públicas vamos a tener que mantener esos instrumentos para que haya servicios financieros en nuestros pueblos, pues entonces quizá por lo que tentemos que volver a apostar es por una banca pública (o porque con instrumentos públicos, como Correos o las Cajas Postales, se puedan prestar estos servicios…)”
Una situación al hilo de la cual el máximo responsable provincial se ha referido a otro de los grandes temas que, vinculado a éste, se está poniendo sobre la mesa en las últimas semanas, afirmando no terminar de entender “cómo ahora se pone de moda que tengan que ser las Administraciones Públicas (en concreto, los Ayuntamientos y las Diputaciones) las que tengan que instalar instrumentos para que los bancos sigan prestando los servicios en los municipios más pequeños, (y que, por tanto, vayan a seguir facilitando que esa entidad gane dinero)…”, ha cuestionado.
En este sentido, se ha manifestado claramente planteando que, “si al final lo que estamos asumiendo es que las administraciones públicas vamos a tener que mantener esos instrumentos para que haya servicios financieros en nuestros pueblos, pues entonces quizá por lo que tentemos que volver a apostar es por una banca pública (o porque con instrumentos públicos, como Correos o las Cajas Postales, se puedan prestar estos servicios…)”.
De forma rotunda, Santi Cabañero ha asegurado no compartir que “un ayuntamiento se tenga que poner a financiar instrumentos financieros para que las entidades financieras (que, al final, lo que te dicen es que atiende a su cuenta de resultados), sigan estando en nuestros pueblos…” y ha sido claro al afirmar que “los que presumimos de ‘ruralistas’ y de defender el medio rural, tenemos que ser muy claros en este discurso”.
Para el máximo responsable provincial, eso vendría a ‘abrir un melón’ que no se sabe cómo se va a cerrar: “Mañana nos dirán que si quieres tener una entidad financiera en el pueblo, ayuntamiento, paga a los trabajadores de la entidad financiera y sigo prestando el servicio; y no, a esto no podemos jugar”.
Cabañero: “Creo que desde todas las administraciones públicas tendríamos que ser más exigentes en que de alguna manera esa ayuda que con dinero público se ha hecho a las entidades financieras, tiene que devolverse, entre otras cosas, atendiendo al mundo rural”
El presidente de la Diputación ha insistido en que, de la misma manera que España ha sido solidaria con las entidades financieras cuando lo han pasado mal, ahora las entidades financieras que tiene que atender al mundo rural.
“Sabemos que por la ley de oferta y la demanda, prestar un servicio en el mundo rural es más caro, por supuesto; igual que un consultorio médico es más caro de mantener en un pueblo que en una ciudad; y que recoger la basura en las aldeas de Yeste es más caro que en edificio Covirco de Albacete (en el que vive la misma gente y se recoge en un solo contenedor)…; pero, si de verdad queremos tener a las personas redistribuidas en el territorio, y si entendemos que esto de verdad es una política de Estado, tenemos que remar todos en la misma dirección”.
Así, ha reiterado que “no vale jugar a que ‘yo’ (entidad financiera) tengo un interés semi-público y, por tanto, ‘ayúdenme’, pero cuando no me interesa, digo que mi cuenta de resultados y mis accionistas son lo que manda y ‘yo me voy’ (y poco menos que si ustedes quieren me quede, pónganme un cajero…)”.
Una opción sobre la que, finalmente, también se ha pronunciado: “Yo no sé si esta Casa va a tener que pasar por ahí o no, no digo ‘de este agua no beberé’ (porque, al final, acabas pensando en los ciudadanos…), pero creo que desde todas las administraciones públicas tendríamos que ser más exigentes en que de alguna manera esa ayuda que con dinero público se ha hecho a las entidades financieras, tiene que devolverse, entre otras cosas, atendiendo al mundo rural”, ha concluido.