Tuvo palabras especiales para los parados al tiempo que garantizó, como prioridades del Gobierno que preside, las prestaciones sociales, sanitarias y educativas.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aprovechó su tradicional mensaje de Navidad para trasladar a todos los castellano-manchegos sus mejores deseos para el próximo año, así como su fe en as posibilidades de esta tierra y “la confianza y la esperanza de que entre todos seremos capaces de superar las dificultades por muy profundas que sean”.
Frente a la nostalgia que recorre estos días en recuerdo de los que no están, el presidente lanzó un mensaje de esperanza para “construir juntos un mundo mejor”.
Barreda hacía esta aseveración tras reconocer que este año que termina ha sido difícil porque una grave crisis de carácter internacional ha afectado a la región. “Los parados son mi máxima preocupación por eso tenemos la obligación de hacer un esfuerzo colectivo para superar las dificultades de la mejor manera posible, y cuanto antes”, dijo el jefe del Ejecutivo autonómico al tiempo que se mostró convencido de que “vamos a salir de esta coyuntura económica”.
En este orden de cosas recordó que desde el Gobierno que preside se trabaja en una doble línea: por una parte, para asegurar la mejor sanidad, educación, prestaciones sociales y atención a la dependencia y al mismo tiempo modernizando esta tierra con más y mejores comunicaciones, acumulando capital físico, tecnológico y humano.
De ahí que para el presidente autonómico la educación sea fundamental porque garantiza la igualad real de oportunidades. “En la escuela de hoy se prepara la sociedad del mañana, en el instituto, en la Universidad, conseguimos tener a los jóvenes mejor preparados de la historia que serán los responsables de asegurar mañana y pasado mañana un futuro mejor, cargado de nuevas posibilidades”, apuntó.